Autor: Macarena
Espeleta G.
Referencia
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Huguet, T.
(2009). El trabajo colaborativo entre el profesorado como estrategia para la
inclusión. En C. Giné, D. Duran, J. Font y E. Miquel (coords), La educación inclusiva: de la exclusión a
la plena participación de todo el alumnado, (pp. 81-94). Barcelona:
Horsori.
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Síntesis
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El capítulo
comienza planteando la necesidad de cambios sustanciales en las prácticas
educativas para que sea posible hablar de inclusión, ya que la educación
estaría construida en prácticas poco inclusivas como la especialización
docente y la enseñanza a grupos homogéneos.
La autora hace
referencia a la necesidad de flexibilizar las fronteras entre los diferentes
profesionales para construir redes de apoyo, siendo el conocimiento
especializado realmente útil cuando es compartido con los docentes. Por lo
que un trabajo colaborativo debe generar estrategias para que todos los
docentes puedan educar a los alumnos distintos junto con el grupo homogéneo,
lo cual potenciaría la seguridad en sus propias capacidades para enseñar a
este tipo de alumnos y con el apoyo de especialistas.
Luego, propone
la necesidad de impulsar cambios en las instituciones educativas para ayudar
a crear climas de colaboración y de organización. La autora menciona una
serie de cuestiones para promover en el aula y en los centros educativos una
cultura colaborativa de respeto,
compromiso, solidaridad y confianza.
En este
contexto, las instituciones educativas tienen gran relevancia como ambiente potenciador
de colaboración. De esta manera, la reestructuración consiste en rediseñar
las estructuras escolares para beneficiar el trabajo colaborativo más eficaz
entre los docentes y en comunidad, potenciando el aprendizaje en común y el
perfeccionamiento continuo.
Para
finalizar, la autora sugiere capacidades, actitudes y estrategias para
beneficiar el trabajo compartido en el aula entre docentes de área o con el
apoyo de profesores especializados.
Una de ellas
consiste en trabajar con dos profesores en el aula, lo cual favorecería la
inclusión y la colaboración, además de ayudar a la mejora y el cambio
educativo. Lo anterior implica que en el aula se dé un contexto de
conocimiento compartido sobre las diversas situaciones y la búsqueda de soluciones alternativas
para lograr los objetivos de la enseñanza en todos los alumnos independiente
de cuales sean sus capacidades.
Por otro lado,
la autora se refiere a la intromisión del profesor especializado en el aula.
Expone que los profesionales especializados deben dejar de ser vistos como
operarios que aplican técnicas en los alumnos y pasar a ser entendidos como
profesionales del cambio educativo que realizan trabajo colaborativo con los
docentes, enfrentándose juntos en el aula y planificando previamente en
conjunto las clases para atender a la diversidad. Lo anterior, debe ocurrir
en un ambiente de respeto para que el profesor se sienta apoyado y no
inseguro de su labor, logrando así un clima colaborativo en donde profesor y
profesional especializado aportan sus saberes y se complementan para lograr
un aula inclusiva.
Otro aspecto
relevante, es cómo se relaciona la colaboración con la planificación, la
comunicación y la evaluación.
En cuanto a la
planificación, se menciona que debe tener en cuenta a todo el grupo,
prestando atención a las diferentes necesidades de los alumnos según la
actividad o contenido a tratar y que tenga en cuenta si los materiales
necesitan adaptaciones para que todos puedan participar. La autora detalla
que aspectos deben ser tratados en la planificación colaborativa.
Respecto de
las comunicaciones que se dan entre docente y alumno otorgan un mayor
conocimiento respecto de las distintas necesidades de los alumnos. Son
instancias que permiten observar y trabajar en estrategias para favorecer
distintos procesos como el de aprendizaje y participación.
Finalmente, la
evaluación conjunta de la experiencia en el aula es una importante instancia
para mejorar las metodologías usadas y la colaboración, por lo que se evalúan
tanto la enseñanza-aprendizaje como la relación colaborativa para ir
mejorando.
Para concluir
el capítulo, la autora recalca la importancia de la colaboración en la
construcción de aulas inclusivas, proponiendo un contexto colaborativo en el
aula y de enseñanza- aprendizaje para
todos los alumnos, con el apoyo de otros docentes o especialistas.
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Comentario
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La
propuesta sobre trabajo colaborativo además de ser una buena estrategia para
potenciar la inclusión en las escuelas, resulta muy relevante para
cuestionarse el rol de los profesionales especialistas en las escuelas, como
lo es el psicólogo educacional.
El que el
especialista tenga una mayor incidencia en el aula y se relacione de manera
estrecha con el docente de manera colaborativa tanto en la planificación de
la clase como en su evaluación para potenciar la atención a la diversidad del
alumnado, nos hace cuestionarnos respecto de la situación actual de estos
profesionales en nuestro país, quienes muchas veces son forman un área de
trabajo aparte y trabajan directamente con los niños, en lugar de
relacionarse con los profesores.
De esta
manera, cabe replantearse el rol de estos especialistas ya que el trabajo
colaborativo parece ser más efectivo que el trabajo en paralelo que se
realiza actualmente.
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Citas textuales
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“(…) a veces
el conocimiento especializado se utiliza para justificar comportamientos de
los alumnos, pero no para aprovechar el potencial educativo de los docentes y
del contexto escolar” (p.83).
“Los centros educativos que quieren mejorar
su grado de inclusión, cada vez son más conscientes de la necesidad de crear
contextos acogedores en los que no haya miedo a exponerse o equivocarse, en
los que se pide y se presta ayuda, se expresan dudas y malentendidos y se fomenta el entendimiento
mutuo” (p.85).
“El problema no es el alumno que no aprende
o que experimenta barreras al aprendizaje; (…) el reto es que todos los
profesores se impliquen en la mejora de situaciones de enseñanza para que
todos los alumnos puedan participar y aprender. Esto sólo se puede hacer
desde la colaboración” (p.91)
“Para
construir aulas inclusivas en las que todos los alumnos puedan aprender y
participar (…) es necesario crear dinámicas de colaboración entre docentes
para que todos vayan tomando responsabilidades de ese proyecto y puedan
participar, sea cual sea su área de conocimiento” (p.94).
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Departamento de Psicología
FACSO
Universidad de Chile
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